No sé a vosotros, a mí me interesa la opinión de mis chicos y chicas cuando hacemos una actividad. Vale que a veces hay que hacer cosas sí o sí, que les cuestan y no les gustan, pero aún así es interesante saber cuál es la dificultad, ¿no?
También es cierto que tenemos muchos indicadores para saber si una actividad es o no placentera para un alumno. Sus gestos y expresiones, su actitud, lo que nos cuenta…
Eso es, habitualmente, lo primero que suele venir a la cabeza: que si no le gusta nos lo dirá, pero cuando trabajamos con personas dentro del espectro del autismo, nos podemos encontrar con dos dificultades. La primera de ellas es que algunos de ellos no tienen lenguaje oral o éste es muy limitado, lo que dificulta la expresión oral. Pero además, incluso siendo verbales, es posible que no sepan decirnos con palabras lo que sienten al respecto (para ello, normalmente, debemos haberles enseñado a manifestar su agrado/desagrado, a dar su opinión y respetarla cuando la ofrecen, un artículo muy interesante de Doble Equipo al respecto, aquí)
Por esta razón se me ocurrió realizar una pequeña evaluación, a realizar tras cada actividad o cada sesión, dependiendo de la situación individual de cada uno.
¿qué os parece? ¿os gusta la idea? ¿la queréis descargable?