Está escrito por Susana Gómez e ilustrado por Alba Aparicio, y la propia autora nos cuenta:
en ocasiones es difícil saber cuál es la causa de la rabieta, puede ser cualquier cosa, una negativa de los padres ante un deseo expresado por el niño, un malentendido, una frustración por no haber conseguido algo, etc. Se pasa rápidamente de un estado emocional alegre a una situación de tensión que afecta a toda la familia. El cuento muestra que las rabietas son pasajeras y que con la ayuda de unas palabras, cariño y comprensión, se puede volver a recuperar el estado inicial de alegría
Lo que más nos gusta es que explica los estados de ánimo del niño y los asocia a un montón de vocabulario y situaciones. Además lo hace desde él punto de vista del niño, con lo que lo expresa tal cual lo siente; por ejemplo dice “me enfado cuando no hacen las cosas que yo quiero”
Utiliza un lenguaje metafórico: el mundo color de rosa, el rojo del enfado, la sensación agria en la garganta… ideal para aquellos que están en un momento avanzado de comprensión de emociones.
Además, es muy respetuoso, los papis ignoran la conducta pero no al niño y cuando se tranquiliza le dan alternativas que él mismo aplica después; dice “me acuerdo de que mamá me dice que para estar cerca de alguien es mejor hablar bajito y al oído”
Además como veis las ilustraciones son muy bonitas y expresivas, utilizando la simbología de los colores rosa, blanco y rojo para los diferentes estados emocionales.
Nuestra recomendación es que lo leáis a menudo con los niños, cuando no estén enfadados; reflexiones con ellos según sus posibilidades y si es posible que lo utilicéis en una mesa de paz o que esté disponible para momentos de tensión.
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