El tablero de actividades es una herramienta que nos sirve para estructurar el trabajo y darle independencia al chico en cuestión; de manera que se gestione la tarea.
El “problema” es que a veces se nos queda pequeño, es una herramienta muy potente, pero si no la adaptamos a las necesidades específicas, pues pasa como con cualquier otro material, que se nos queda cojo.
En este caso concreto, lo que pasaba es que la autonomía la tenía totalmente superada: seguir el orden, seleccionar la actividad de encima de la mesa, hacerla y ponerla en la caja de acabado. Y nos interesaba continuar dándole un carácter escolar, para fomentar la autonomía en el aula.
ASí que le hemos añadido un archivador con las fichas dentro, y las actividades se han complicado incluyendo discriminaciones y seguimiento de instrucciones escritas.
¿El resultado? ¡Genial! Estamos muy orgullosas de ti campeón!